Despido procedente - ¿Cuáles son todos sus tipos?

Despido procedente

El despido laboral finaliza la relación entre un empresario y un trabajador. Existe diversidad de circunstancias que pueden definir el despido procedente que puede estar  enfrentando un trabajador.

Las leyes establecen el tipo de despido que puede presentarse cuando finaliza una relación laboral, así como el proceso que se debe seguir ante este trance.

¿Cuáles son los tipos de despido?

Existen diferentes tipos de despidos laborales, el despido procedente es el más usual.

Sin embargo, todos están contemplados en el estatuto para trabajadores de manera amplia. Veamos con detenimiento cada tipo de despido:

Despido procedente disciplinario

Este tipo de despido se presenta cuando el empresario prescinde de los servicios laborales del trabajador por incumplimiento de alguna clausula estipulada en su contrato.

El Estatuto para Trabajadores en el artículo 54, especifica las causas posibles del incumplimiento por parte del trabajador:

  • Indisciplina en las horas laborables.
  • Falta de acato a las órdenes de sus jefes.
  • Falta de productividad y rendimiento en sus labores.
  • Trastorno de las capacidades físicas por abuso de alcohol o algún tipo de drogas.
  • Enfrentamiento verbal con sus compañeros de trabajo, así como con sus superiores.

Despido procedente objetivo

El despido objetivo es cuando se presenta por razones específicas. Podemos generalizar algunas de ellas.

Las económicas, de producción, organizativas y técnicas son las más comunes expuestas por los empresarios como justificación del cese de las funciones laborales de empleados.

Encontraremos los siguientes motivos que están contempladas en esta modalidad de despido:

  • Falta de efectividad en las labores habituales del trabajador.
  • Inadaptación a sus labores habituales y a las diferentes modificaciones técnicas.
  • Despido colectivo según el artículo 51.1 establecido en el Estatuto de Trabajadores.
  • Inasistencias con justificativos que lleguen al 20% en el lapso de dos meses consecutivos o el 25% en 4 meses discontinuos.

Esto será siempre y cuando el total general de asistencias en el año anterior esté por encima del 5% de las jornadas hábiles.

Las faltas que se derivan de tratamientos médicos de enfermedades graves, no computan dentro de estas estipulaciones establecidas.

Despido procedente colectivo

El despido colectivo se produce cuando un empresario prescinde del servicio laboral de cierto número de trabajadores.

Veamos algunas razones que explican el despido colectivo o “Expediente de Regulación de Empleo” o ERE de extinción:

Se considera despido colectivo cuando 10 trabajadores, como mínimo de una empresa, se despiden como menos de 100 empleados.

El despido colectivo ocurre cuando se prescinde al menos al 10% de aquellos trabajadores en empresas que contienen entre 100 y 300 empleados.

Debemos aclarar que los trabajadores que están involucrados en un despido colectivo, podrán disfrutar de una indemnización.

Esta compensación será de 20 días de salario por cada año de trabajo en su empresa.

Despido procedente, improcedente y nulo

Es importante aclarar que estos despidos son utilizados como nombres opcionales a los anteriores tipos de despidos mencionados.

El reclamo del trabajador ante el juez siempre será la alternativa legal que procederá para cualquier tipo de proceso de reclamación.

Las consecuencias legales para ambas partes están implícitas en cada tipo de despido procedente, improcedente y nulo.

Despido procedente

El despido procedente es aplicado cuando el empresario con pruebas y justificativos, logra acreditar los motivos que lo llevan a cesar del contrato que los mantenía unidos en el área laboral.

No habrá ningún tipo de indemnización si el despido está sustentado en causas disciplinarias.

Si por el contrario es un despido objetivo, se deberá cancelar una indemnización de 20 días por año hasta el máximo de 12 mensualidades.

Despido improcedente

El despido improcedente será calificado por el juez cuando un empresario no logre demostrar el incumplimiento laboral del empleado.

Esto también podría ser calificado de igual manera cuando se ejecute sin cumplir con los requisitos legales pertinentes especificados en la legislación laboral.  

Deberá en este caso, reinsertarse al trabajador dentro de la empresa con las mismas condiciones establecidas o indemnizarlo.

Esta retribución monetaria será de 45 días por año de trabajo por el tiempo en que haya prestado sus servicios.

El salario será de 33 días por cada año trabajado. La suma de la indemnización no puede ser mayor a los 720 días de salario.

Despido nulo

Esta forma de despido se establece cuando se violen los derechos fundamentales establecidos en la legislación española o en su Constitución.

De igual manera, se aplica este tipo de despido cuando la causa que lo origina se relaciona con discriminaciones establecidas en la ley.

Aquí se restituye de al trabajador en su cargo y le retribuye los salarios correspondientes a los meses cesantes por culpa de este despido.

El despido y su proceso

El despido en general debe cumplir una serie de procesos para que logre realizarse con efectividad.

Estos pasos son fundamentales para lograr con precisión y eficacia, el tipo de despido adecuado a cada trabajador:

El preaviso

Si el despido es objetivo, debe avisarse a través de una carta con 15 días de anticipación al trabajador, los motivos del cese de funciones. Esta fase es de obligatoriedad por parte del empresario.

En caso de no cumplir con este requisito, el empresario deberá cancelar al trabajador los días de preaviso.

La carta

Este tipo de documento es fundamental para que el empresario especifique las causas que motivaron el despido.

Aunque la firma del trabajador es opcional, si el mismo no está conforme deberá colocar “No conforme” al lado de la firma.

El finiquito

Corresponde a la cantidad correspondiente a los salarios, vacaciones y otros pagos  extras que el trabajador no percibió.

La indemnización

Esta retribución monetaria dependerá de diferentes aspectos a analizar: el tipo de contrato, la antigüedad del trabajador, el salario mensual, el salario anual.

En este punto se puede llegar a un acuerdo con el empresario. Un abogado laborista podrá asesorar al trabajador para que lleve a feliz término sus aspiraciones, si su caso es procedente.

Tendrá un plazo máximo de 20 días hábiles luego del despido para proceder a realizar algún tipo de reclamo judicial.

Aspectos del Proceso Judicial

La conciliación previa

Este procedimiento lleva como intención, evitar el proceso judicial. Un acuerdo entre las partes podrá intentarse a través de la papeleta de conciliación.

El abogado laborista se encargará de este procedimiento para conseguir beneficiar a su representado a través de un acuerdo nuevo.

El juicio

Antes del juicio se podrá nuevamente intentar que las partes lleguen a un nuevo acuerdo. En caso de fracasar en el intento, el juez del caso determinará quién tendrá el beneficio de la razón.